por Dina Meza -defensoresenlinea.com
El establecimiento de la Comisión de la Verdad sin consultar al pueblo tal como se está haciendo, tiene el propósito de vender imagen internacional de que aquí en Honduras todas las cosas se resolvieron, pero internamente se está matando y persiguiendo a la gente, dijo Bertha Oliva, Coordinadora del Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras, COFADEH.
Desde el golpe de Estado contra el presidente Manuel Zelaya Rosales, se juega con el tema de la Comisión de la Verdad, la misma figura en el Acuerdo de San José y Diálogo Guaymuras, en ambos en ningún momento se señala la deducción de responsabilidades para los responsables del rompimiento del orden institucional y de violaciones a los derechos humanos.
El llevado y traído tema no solamente tiene el propósito de contener la presión popular, esta misma estrategia se utiliza desde los ochenta, con las víctimas y familiares de las violaciones a los derechos humanos, entre las que figuran las desapariciones forzadas de más de 184 personas. Gobiernos, Fuerzas Armadas en contubernio con los Estados Unidos, han jugado con el dolor de las familias que perdieron a sus seres queridos.
Para la Coordinadora del COFADEH el argumento de los golpistas a través del gobierno de Porfirio Lobo en el sentido que no podrá integrar la Comisión de la Verdad, quien se haya pronunciado sobre el tema, es ilógico pues desde que se dio el golpe de Estado todo el mundo tomó su postura a favor o en contra.
Este pueblo ha sido tan engañado, tan golpeado, que se establecieron comisiones fuera del país, y se decía que ya se iba a firmar y que se iba a restablecer el orden institucional, y mientras se hablaba se torturaba a la gente, golpeaban gaseaban, expresó la entrevistada.
Pero para ella lo vital en este caso es que si todo eso si no es destinado a deducir responsabilidades y establecer la verdad no se habrá dado ese paso de reconciliación y de reencuentro en Honduras “el que salga responsable debe asumir que violó la Ley y que violentó la Constitución de la República, pero sobre todo en una Comisión de la verdad las violaciones a los derechos humanos no son negociables porque son crímenes de lesa humanidad”.
Una Comisión de la Verdad significa que no hay borrón y cuenta nueva, borrar la página es ser cobarde y no aceptar las responsabilidades, es necesario retomar las demandas que el soberano ha puesto en el tapete de la discusión y de allí empezar a analizar qué es lo mejor para este pueblo, aquí hay una deuda sin saldar, hay una agenda l pendiente, podemos ponernos desde la década de los 80, reiteró.
Oliva manifestó que es necesario que se establezca la responsabilidad jurídica que han tenido algunas entidades como las que imparten justicia, para que quienes están en ellas y participaron de ilegalidades en el marco del golpe de Estado, no continúen en sus puestos.
Cuestionó el hecho de la conformación de Comisión de la Verdad desde un solo sector, los golpistas, ellos son los que han decidido quién integra dicha comisión eso no tendrá ningún resultado, lo que se sigue es un guión que desde afuera se ha establecido aún antes del golpe de Estado.
“En otros países donde ha habido conflictos y se instala una Comisión de la Verdad es para deducir responsabilidades legales y con el propósito de restablecer el mal causado hay acercamiento de las partes en conflicto, en Honduras sería con el Frente Nacional de Resistencia Popular, que es el que tiene la representación del pueblo hondureño”, dijo Oliva.
Aclaró que no es un deseo de revancha, “sino que como defensora de derechos humanos lo que queremos que no se repitan los hechos y eso se logra si hay sanción, si hay castigo, si hay identificación y si hay aceptación de su responsabilidad”.
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